Capilla del Señor de Zelontla

En esta modesta capilla recibe culto el Señor de Zelontla, el Cristo de los mineros.

La escultura de encino, quizá del siglo XVII, representa a Jesús, el Buen Pastor, pero originalmente pudo haber sido un cristo doliente. La devoción popular le ha colocado un sombrero de fieltro y una lámpara de carburo, como las que usaban los mineros. Se le construyó una capilla que consta del templo, la capilla y una pequeña bodega. Es de una sola nave, de mampostería, con revestimiento de cañón seguido y piso de mosaico.